Actualmente nos preocupamos demasiado por lo que dice la balanza respecto a nuestro peso, cuando lo verdaderamente importante es cuánto de ese peso es musculo y cuánto es grasa, pues los altos niveles de grasa en el cuerpo son nocivos para la salud porque contribuyen al desarrollo de múltiples enfermedades. Es una cuestión que va más allá de la estética.
Sin importar el número que marque la balanza, debemos preocuparnos por sustituir grasa por músculo. Ejercitar con cardiovasculares te permite quemar grasas y reforzar con pesas hace que el musculo crezca, pero además debes prestar atención a la alimentación ya que es la clave.
Consume regularmente vegetales verdes, pero sobre todo espinaca debido a que contiene una fuente importante de glutamina, un aminoácido importante para el desarrollo de masa muscular magra, además aumentará la resistencia y el tono muscular. No abandones los lácteos y sustituye los tradicionales por los bajos en grasa, con el fin de obtener los nutrientes esenciales para la formación de músculos.
Por otro lado, consume huevo constantemente. La clara es la reina de las dietas para desarrollar musculatura y carne magra. No te olvides del pollo ni del atún, ya que ambos son fuentes naturales de proteínas y son fáciles de metabolizar.
Cambia las chucherías por frutos secos o semillas, pues son ricos en fibras y grasas naturales y consumir pequeñas porciones varias veces al día acelera el metabolismo.
Los antioxidantes son otra herramienta eficaz para evitar el deterioro de las células musculares. Además, las vitaminas C y E favorecen el proceso anabólico de recuperación, regeneración y crecimiento muscular. Finalmente sustituye los carbohidratos por sus versiones integrales, eso ayudará a mantener bajos los niveles de grasa.
YR
Con información Salud180.
Fotografía Gettyimages.
