El 23 de abril se celebra el Día del libro. En Venezuela, la festividad cada año ha cobrado mayor sentido, con el auge de la literatura local

El Sumario – Cada 23 de abril, por lo general, Latinoamérica tiene algo en común: varios de sus países organizan diversas ferias del libro. Esto en conmemoración al Día del libro, que se celebra en la mencionada fecha. Y aunque Buenos Aires se lleva el primer lugar en lo referido a actividades para conmemorar la festividad, Venezuela también hace lo suyo; un ejemplo es la Feria de Lectura que actualmente se lleva a cabo en Altamira, Caracas.

En lo que va de siglo XXI, la literatura venezolana ha ganado terreno en las vitrinas. Las razones son muchas, pero lo cierto es que hoy día se comercializan más textos de autores criollos, dentro de nuestro país, de lo que se hacía antes. Asimismo, el talento patrio ha ganado, poco a poco, prestigio en las competiciones internacionales. Un ejemplo es Alberto  Barrera Tyszka, quien en el 2015 ganó el Premio de novela Tusquets y ya antes había conseguido el Premio Herralde, uno de los más importantes del mundo de habla hispana.

Así, nombres como Oscar Marcano, Eduardo Liendo, Ana Teresa Torres y Ednodio Quintero (quienes continuaran a la magnifica generación de los Carlos Noguera y Francisco Massiani), fueron abriendo paso a Federico Vegas y posteriormente a los Héctor Torres, Fedosy Santaella, Rodrigo Blanco Calderon, Gisela Kozak Rovero, Lucas García París, Sol Linares, Eduardo Sánchez Rugeles, entre otros prestigiosos autores que han hecho de la literatura un modo de vida y cuyos libros se han vendido muy bien en el territorio nacional.

Aunque la tarea pendiente sigue siendo que la literatura criolla traspase fronteras, ya se han dado pequeños pasos en ese sentido. Hace unos meses, por ejemplo, la recién publicada novela The night, de Rodrigo Blanco Calderon, fue incluida en la lista de El País de los libros de autores latinos más esperados para el 2016. El libro, vendido en España con el sello Alfaguara, ha generado repercusiones positivas.

El anterior es solo un ejemplo. Se podrían sumar muchos más: Fedosy Santaella siendo finalista del Premio Herralde o siendo reeditado en España; las presentaciones de los últimos libros de Elisa Lerner y de Krina Ber en Miami; o el espacio que están encontrando los textos criollos en algunas librerías colombianas. En fin, son varios pasitos que han venido sumando de a poco.

Mientras tanto, en el Día del libro, el equipo de El Sumario te invita a acercarte a las librerías más cercanas a disfrutar del talento criollo y del internacional; porque, como escribió el autor argentino Andrés Neuman, leer es una forma de vivir dos veces.

Samuel Bello

Fotografía Gettyimages.