Conoce la historia de tres huskies y un gato que se convirtieron en compañeros inseperables a pesar de su diferencia de raza y tamaño

La solidaridad es uno de los gestos más bonitos que tenemos los humanos, aunque no somos los únicos seres vivos que tenemos esta iniciativa, pues los animales también son solidarios entre sí. Cuando alguno siente que otro está en peligro su respuesta impulsiva es ayudarlo.

Este es el caso de esta familia de perros Husky, estos perros encontraron a un gatito en peligro, pues su estado de salud no estaba bien, además el clima de nieve no lo ayudaba, por lo que lo llevaron a su hogar para que su dueña lo viera y lo ayudara.

Tras la recuperación del gato, éste se volvió parte de la familia y desde entonces estos tres huskies y el gato se volvieron compañeros inseparables.

Geraldine Puche