La ciudad de Chesham, al noroeste de Londres, será pionera en la instalación de WiFi en las calles. En esta ocasión, la infraestructura que se empleará serán las aceras. La conexión inalámbrica estará integrada en el pavimento donde habrá puntos de acceso, que se conectarán con los repetidores, a su vez unidos al cableado de fibra óptica.

Las aceras-WiFi proporcionarán además una velocidad superior a la media de Reino Unido, unas siete veces más veloz. Aunque lo más destacado del proyecto no es la velocidad de la conexión, por supuesto, lo que más llama la atención es la originalidad.

Las autoridades locales se han puesto de acuerdo con la compañía Virgin Media para integrar puntos de acceso bajo el pavimento. Estos estarán conectados con las antenas que la empresa posee en edificios y calles.

La parte más delicada sin duda consistirá en instalar los puntos de acceso en el pavimento. Esta operación se hará practicando perforaciones en la superficie y, una vez introducido el equipo de telecomunicaciones, tapándolas mediante una especie de tapas de alcantarilla, fabricada con una resina especial que deja pasar las señales de radio.

El proyecto también contempla el uso de mobiliario urbano para crear la red de WiFi, lo que implicaría la instalación disimulada de puntos de acceso en farolas, por ejemplo.

AW

Con información de América economía.

Fotografía Gettyimages.