La existencia de las ondas gravitacionales fueron confirmadas después de que el científico alemán aseguró su veracidad hace un siglo

Este jueves científicos del Observatorio de Interferometría Láser de Ondas Gravitacionales (LIGO por sus siglas en inglés) anunciaron en Washington que comprobaron directamente la existencia de las ondas gravitacionales predichas por Albert Einstein hace un siglo.

Dichas ondas se producen cuando las masas se aceleran, comprimen y estiran el espacio. Se propagan en el vacío a la velocidad de la luz y distorsionan el espacio-tiempo, de forma parecida a las ondas que produce una piedra que se lanza al agua.

El observatorio LIGO captó la huella de la fusión de dos agujeros negros. Esta prueba no solo confirma la existencia de las ondas gravitacionales, sino que supone una nueva era en la astronomía, afirmaron los investigadores.

«Hemos construido un nuevo tipo de telescopio y logramos abrir un campo totalmente nuevo», afirmó el fundador del sistema LIGO, el profesor Rainer Weiss, del Instituto Tecnológico de Massachusetts. Por primera vez se pudieron observar directamente agujeros negros, destacó la profesora Alessandra Buonanno, directora de Física Gravitacional en el Instituto Max Planck de Potsdam, Alemania.

Por lo general las ondas gravitacionales son tan débiles que Einstein no creía que pudiesen medirse. Aun así, los físicos intentaban desde hace 50 años encontrar una prueba directa de su existencia, aunque todos los hallazgos reportados hasta ahora habían resultado ser inconsistentes.

«Hemos observado las cuatro últimas revoluciones de dos agujeros negros antes de que se fusionasen», explica el profesor Bruce Allen, director del Instituto Max Planck de Física Gravitacional de Potsdam y Hannover.  Para Allen esta confirmación es uno de los hallazgos más importantes de la física en las últimas décadas.

Alejandra Watts

Con información de dpa.