Un grupo de antiguos estudiantes del Instituto de Tecnología de California en Estados Unidos desarrollaron un antifaz de sueño inteligente con la capacidad de modificar el ritmo biológico o circadiano de la persona que lo lleva puesto mientras duerme.
Es así como el dispositivo frena los efectos del jet lag más comunes como fatiga, problemas digestivos, falta de memoria, apatía o irritabilidad.
Su funcionamiento es sencillo: mediante pulsos de luz de milisegundos, la máscara del sueño utiliza las mismas vías neuronales que la luz natural, de una manera que está optimizada para el horario de sueño del usuario a través de una aplicación de teléfono inteligente asociada.
Así, este gadget de sincronía biológica comercializado por Lumos Tech consigue evitar cualquier trastorno relacionado con el ritmo circadiano como el famoso jet lag, pero también para otros desórdenes del ritmo vital, trastornos relativos al sueño o incluso el afectivo estacional.
EC
Con información de agencias.
Fotografía destacada Gettyimages.
