A 20 años de la emblemática oveja Dolly, el zoo de clones mundial ha logrado tener caballos, terneros y otros animales de la experiencia científica

El Sumario – La emblemática oveja Dolly, creada hace 20 años, fue el resultado de la copia de un mamífero que no contaba con un padre biológico; fue creada gracias a la transferencia nuclear de células somáticas. Con la llegada de Dolly se desató una gran polémica mundial sobre la ética científica y se habría en un futuro clones humanos.

Luego de Dolly, a través de diferentes investigaciones científicas, el zoo se convirtió en un espacio para clones, donde lograron tener caballos y terneros a través de un óvulo modificado el cual es introducido en una solución nutritiva que funcionaría para estimular su división y después se implanta en una madre.

Según ha descrito el Instituto Tesbiotech de la ciudad de Múnich, “en Estados Unidos, por ejemplo, se vende el esperma de toros clonados y allí también hay empresas que ofrecen de forma limitada caballos de carreras clonados”.

Por su parte, en Corea del Sur, la gente puede encargar clonar a sus mascotas fallecidas y también se clona a perros detectores de narcóticos que son especialmente buenos en sus tareas.

China ha anunciado el nacimiento de una vaca clonada a la que se le haría introducido un gen para mejorar la calidad de la carne del animal.

Dolly llegó el cinco de julio de 1996 a Escocia, donde vivió fuertemente custodiada, para ser protegida de las personas que se oponían a los estudios de clonación que se realizaban a dicho animal. Para el 23 de febrero de 1997 fue cuando se dio a la luz el exitoso resultado de clonación.

Actualmente se concluye que los animales clonados pueden tener una vida larga y saludable, sin presentar signos de envejecimiento prematuro, sin embargo, muchos opositores a esta nueva técnica, han resaltado que muchos de estos intentos de clonación fracasan y los embriones perecen en el intento.

María Fabiola Maldonado

Con información de dpa