Ingerir comestibles sin padecer hambre puede generar enfermedades crónicas no transmisibles

El Sumario – La nutricionista Ariana Araujo sostuvo que los ciudadanos venezolanos actualmente están padeciendo de una relación emocional con la comida debido a la crisis por la que atraviesa el país, obligándolos a buscar vías de escape que están relacionadas con el consumo excesivo de grasas y azúcar.

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“El comer dulces y otros alimentos no saludables dispara neurotransmisores, como la dopamina, que activan el centro de recompensa a nivel cerebral”, expresó Araujo.

La también especialista en psicología de la salud dijo que consumir alimentos cuando se sufre de depresión o de ansiedad solo genera adicción, porque no se estaría ingiriendo los comestibles por hambre sino por problemas relacionados a un aspecto psicológico.

Araujo, advierte que el padecimiento antes mencionado puede generar enfermedades crónicas no transmisibles  como la diabetes tipo 2, hipertensión y afecciones cardiovasculares.

Gabriel Velásquez/@Vqzgabriel

Con información de Nota de Presa

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