Muchas personas se aventuran a comprar nuevos zapatos para hacer ejercicios guiándose por el color o el diseño. Pero cuidado, esto puede ser un arma de doble filo, pues podría suceder que ese zapato en especial no favorezca a tus pies.
Antes de comprar zapatillas, lo primero que debes observar es qué posición adquiere el pie al probar el calzado. Si el talón está levemente inclinado hacia el lado interior, es normal. Eso se conoce como pronación. Quien sólo note este detalle y no tenga problemas ortopédicos, podrá comprar zapatillas normales.
Pero quienes tengan una inclinación del talón pronunciada hacia la cara interna presentan una sobrepronación. ¿Cómo saberlo? Observando cómo se siente el pie al apoyarlo o pidiéndole a un amigo que mire desde atrás cuando uno camina. En este caso, será mejor optar por zapatillas que ofrezcan un buen apoyo y no refuercen esta tendencia.
Además, la amortiguación de las zapatillas también será fundamental a la hora de trotar. La regla general es: quienes tengan menos entrenamiento precisarán mayor amortiguación, ya que las personas más entrenadas tienen los músculos más desarrollados y no precisan que la pisada sea tan atenuada.
Así que, antes de comprar tus nuevos zapatos, toma en cuenta estas recomendaciones principales para elegirlos. Así evitarás problemas musculares, de articulaciones y te sentirás cómodo durante y después del ejercicio.
EC
Con información de dpa.
Fotografía Gettyimages.
