El Sumario – Esta joven emprendedora vende papitas, jugos y chocolates. Su negoció lo montó a un lado de la vía, donde sobre una mesa ofrece los productos a los cientos de clientes que llegan diariamente a ese punto, móvil en mano, en busca de lo que se ha convertido en un fenómeno mundial: un Pokémon.
Miranda, residente de Kentucky, Estados Unidos, asegura que en las últimas semanas ha facturado en promedio 200 dólares diarios, el éxito es sencillo, ubicó su negocio en lo que se conoce como una Poképarada; sitio en el que los jugadores de Pokémon Go pueden conseguir todo tipo de objetos de forma gratuita en el juego.
No se ha limitado en detalles. Utiliza los colores amarillo, azul y rojo de los equipos a los que es posible optar dentro del juego para ofrecer asimismo su puesto y catálogo de snacks para cada grupo de usuarios.
El resto tiene que ver con la decoración artesanal basada en elementos de Pokémon GO, incluyendo el título de Pokéstop Shop y la insignia de los equipos pintada a mano también.
María Cordero
Con información de Agencias
