Maquillar los ojos no es tan simple como parece, es importante conocer el área para tener una noción de lo que puedes y lo que no puedes hacer al momento de aplicar cada producto.
Te ofrecemos una guía rápida sobre cómo saber dónde aplicarlos y cómo hacer que tu mirada resalte con estilo para cada ocasión.
- Arco de la ceja: para destacar las cejas y hacer más abierta el área de los ojos, puedes colocar una sombra color mate o un brillo pálido al ras del arco, siguiendo la línea desde la mitad de la ceja para iluminar.
- Cuenca: entre el arco de la ceja y el párpado se encuentra la cuenca, puedes aplicar una sombra más oscura para darle más dimensión al ojo. Si el párpado está caído, puedes jugar con la ubicación al ponerte la sombra.
- Párpado: la creatividad juega un papel importante en esta etapa, en especial con el delineador. Una vez que llegues a la «V externa» puedes aplicar de forma más profunda las sombras o delineadores. Para obtener un efecto más suave puedes hacerlo en forma de «C».
- Línea superior de las pestañas: justo arriba y por encima de los bordes del párpado superior, define el ojo con delineador y sombra, o simplemente usa rímel. Esto le dará profundidad a tu mirada.
- Línea inferior o de agua: esta parte es el borde interno del ojo, para delinearlo y darle un efecto ahumado a tu mirada o repasarlo con un lápiz pálido para hacer que el ojo se vea más ancho y despierto.
- Línea inferior de las pestañas: justo debajo de la línea de agua, tus pestañas inferiores el delineador y la sombra pueden aplicarse para definir los ojos.
- Lagrimal: la esquina interna del ojo es perfecta para añadir una sombra pálida o brillante y dar la sensación de unos ojos más grandes.
NG
Con información de agencias.
Fotografías Gettyimages.
