Tao perdió la visión luego de que se le diagnosticara glaucoma, posteriormente llegó Oko y sin dudarlo le brindó toda su ayuda

El Sumario – Un cachorro de 16 semanas asumió por sí mismo el papel de ayudante de su amigo, un golden retriever ciego de 11 años. El perro anciano llamado Tao perdió su visión por causa de un glaucoma, por lo que sus dueños le buscaron un compañero.

Fue así como llegó Oko a su hogar, un hermoso perrito que sin que se lo pidieran, asumió el papel de perro guía para cuidar a su amigo. Este cachorro no tenía ningún tipo de entrenamiento, todo se trató de un vínculo creado de forma natural entre las dos mascotas. Ahora, dan paseos juntos y van por doquier con total seguridad.

La propietaria contó que Tao tuvo una enfermedad bastante irregular, explicando que fue diagnosticado con glaucoma y rápidamente perdió la vista. Sufría tanto por su problema ocular que la mejor opción fue removerle sus ojos.

Por suerte, Tao es un perro inteligente y aprendió nuevos comandos para llevar una vida sin visión alguna.

Aunque aprendió, parecía que le faltaba algo, por lo que la mejor decisión fue buscarle un compañero de aventuras. Ahora que al fin lo tiene, parecen llevarse muy bien y es que hacen casi todo juntos, una muestra de que para ser hermanos no es necesario tener la misma sangre.

De esta manera, el pequeño cuida del grande, le indica qué camino es el más correcto al momento de pasear para evitar cualquier tipo de peligro, según relatan sus dueños.

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Rubén Vásquez

Con información de medios internacionales y redes sociales