Su dueña, la señora Yagi, tuvo la idea de crear un refugio que sea agradable para las personas, que eventualmente opten por adoptar alguno de los felinos que allí habitan
Su dueña, la señora Yagi, tuvo la idea de crear un refugio que sea agradable para las personas, que eventualmente opten por adoptar alguno de los felinos que allí habitan

El Sumario – Durante los últimos años las cafeterías temáticas son una tendencia que se replican en distintos lugares de todo el mundo, bien sea basadas en series de televisión o especiales para niños.

Uno de los que más se lleva la atención, son esos espacios en los que los animales son bienvenidos, en los que incluso, algunos de ellos viven dentro de los lugares a la espera de ser adoptados

Entre esas opciones, el café “Nekobiyaka” en Japón, es un establecimiento bastante particular pues, no solo alberga a gatitos, sino que se trata de uno exclusivamente para felinos negros, con la finalidad de derribar el mito de la mala suerte a la que se asocia a estos animales y se le busca entregarles una familia entre las personas que asisten al local.

Fue en el año 2013 cuando su dueña, la señora Yagi, tuvo la iniciativa de buscarles un hogar a estos felinos específicos, dado que la tasa de adopción de los gatos negros es más baja que la del resto de colores.

Por eso, para evitar que sean sacrificados, esta mujer les da un techo en su café a la espera de una familia que los quiera. El negocio, al que le va muy bien y cada vez son más las personas que se acercan para ver a los gatitos negros que viven allí, se volvió un lugar turístico de la ciudad japonesa de Himeji.

El café siempre tiene un número mínimo de 10 gatos rodando, y cuando uno es adoptado, la propietaria siempre trae otro del refugio. Según informaron los medios locales, para abril de 2020 la señora Yagi le encontró casa a 321 gatitos negros.

Finalmente, Nekobiyaka tiene un precio de entrada de 1.000 yenes, unos 9 dólares por persona, por una hora, y 500 yenes (4 dólares) por cada media hora extra. La pandemia por coronavirus afectó fuertemente el negocio, sin embargo, su dueña no quiso cerrarlo y abandonar a los gatitos que dependen de ella, por lo que hizo una petición de ayuda online y recibió unos 11.000 dólares en donaciones.

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Rubén Vásquez

Con información de medios internacionales