El pasado jueves la compañía estadounidense SeaWorld, que posee la mayoría de las orcas para espectáculos en Estados Unidos y Europa, anunció el final de su programa de reproducción de estos mamíferos marinos en cautividad, lo que significa un enorme logro para los defensores de los derechos de los animales.

El presidente de SeaWorld, Joel Manby, señaló en un comunicado de prensa: «Nuestros clientes visitan los parques marítimos, en parte, para ver orcas. Pero un creciente número de personas piensa que las orcas no deben estar en cautividad. Al hacer que esta sea la última generación de orcas en cautividad y cambiando la forma en que nuestros visitantes contemplarán a estos magníficos animales, estamos proporcionando una experiencia realmente importante». Por lo tanto, no solo dejarán de reproducirse en cautividad –su captura está prohibida en numerosos países–, sino que ya no organizarán espectáculos con orcas.

Medio centenar de estos cetáceos permanecen en cautividad y participan en espectáculos. Según la organización WDC (Whale and Dophin Conservation), 46 orcas son utilizadas en espectáculos en Argentina, Canadá, Francia, España, Estados Unidos y Japón, 35 de ellas nacidas en cautividad. Esta ONG mantiene que China y Rusia albergan 11 orcas capturadas desde 2012.

Alejandra Watts

Con información de El País.

Fotografía Gettyimages