El Sumario – Ayudar sin esperar nada a cambio es un gesto sanador, pero más allá de eso parece aliviar los caprichos del destino o por lo menos así le ha funcionado a Mason Wells, el misionero mormón que ha escapado a tres atentados yihadistas.
Con tan solo 19 años ha viajado a varios lugares para predicar su mensaje de sanación, pero de cada viaje le ha quedado algo más que una simple experiencia, ha encontrado siempre una segunda oportunidad para vivir.
En abril de 2013 asistió al maratón de Boston donde participaba su madre, se ubicó a una cuadra del lugar donde explotaron las bombas instaladas por los hermanos Tsarnaev. A pesar de la cercanía no sufrió ningún daño.
Dos años más tarde se encontraba en Paris cumpliendo con una nueva misión religiosa, vivía a pocas cuadras de la sala en donde se perpetraron los atentados y aun así no corrió mayores riesgos.
Este martes fue víctima de los ataques en Bruselas perpetrados en el aeropuerto, aunque sufrió algunas quemaduras, más o menos graves, continua con vida y más aferrado que nunca a su fe y su mensaje de sanación.
Yelimar Requena
Con información de dpa.
