Soona, una chimpancé de 19 años de edad que vivía en el Zoológico de Monarto en Australia, se encontraba embarazada y tenía una malformación uterina por lo que murió al momento de dar a luz.
Zombi, su amiga, la acompañó durante el momento de agonía y se mantuvo con ella hasta el final. Mientras tanto, uno de los machos del clan, llamado Gomba, retuvo a la cría y se encargó de ella hasta que Zombi pudo tomar el control.
La chimpancé adoptó al huérfano, al cual se le dió como nombre Boon, como hijo propio mostrando un acto desinteresado de amor por parte del animal, ya que al encontrarse en un avanzado estado de gestación es muy difícil que una chimpancé adopte a una cría, según anuncian los especialistas del zoológico.
BB
Con información de Seamos más Animales.
Fotografía Gettyimages.
