Este mes se cumplieron 55 años del viaje de los perros soviéticos Belka y Strelka al espacio. Ambos se convirtieron en los primeros animales en salir del planeta y volver sanos y salvos. ¿Te gustaría saber si tu perro está calificado para ir a la Luna? ¡Observa su comportamiento y lo descubrirás!
- No reacciona ante fuertes ruidos: En la base del Instituto de Problemas Médicos y Biológicos de Moscú, donde se llevaba a cabo el entrenamiento de animales, los perros se acostumbraban en primer lugar a largas estancias en un espacio cerrado con mucho ruido de fondo.
- Come de todo: La alimentación de los perros espaciales era una masa gelatinosa pensada para satisfacer todas las necesidades sólidas y líquidas de los animales.
- Es delgado: La primera selección de animales para volar al espacio determinó que debían pesar como máximo 6 kilos, tener una altura de hasta 35 centímetros y su edad debía estar comprendida entre los 2 y los 6 años.
- Debe ser guapo: Los perros debían resultar atractivos para sus presentaciones a los medios de comunicación. Además, debían tener un pelaje de color claro para que se viera mejor desde las pantallas.
- Responde cuando lo llaman por un nombre ruso: Belka y Strelka en realidad se llamaban Albina y Markiza. Sin embargo, el comandante en jefe de las tropas de misiles de designación estratégica, Mitrofán Nedelin, exigió que los nombres extranjeros de los perros se cambiaran por nombres rusos.
- Debe ladrarle a los satélites estadounidenses: Cuando el primer satélite de comunicaciones de la NASA, el Echo-1, sobrevolaba Baikonur, Belka y Strelka, que en ese momento se encontraban volando en el Spútnik-5, comenzaron a ladrar. A los controladores les dio la sensación de que los perros le ladraban al satélite.
Belka y Strelka se convirtieron en heroínas y visitaron muchas guarderías y colegios. Pocos meses después, Strelka tuvo cachorros, uno de los cuales fue llamado Pushinka y perteneció a Jacqueline Kennedy, la esposa del presidente de Estados Unidos, John Kennedy.
Hoy en día sus cuerpos se encuentran en el Museo de la Cosmonáutica de Moscú y su vida sigue inspirando a artistas, escritores y animadores. En 2010, con motivo del 50º aniversario del vuelo, se estrenó una película de animación en 3D titulada “Belka y Strelka. Perros estelares”.
AG
Con información de Tecno.