El Sumario – El diario Wall Street Journal informó que durante seis meses un grupo de alumnos de la Universidad Tecnológica de Georgia, Estados Unidos, recibió clases de Jill Watson, un programa de inteligencia artificial que sirvió de asistente en línea sin que ninguno se diese cuenta.
«Me quedé atónico. Cuando hablaba con ella, parecía que estaba tratando con un ser humano de verdad» dijo uno de sus alumnos pues la labor del robot era resolver las inquietudes que más de 300 universitarios le enviaban a través de correo electrónico sobre sus programas informáticos.
Lo cierto es que no podría haber sido más difícil para los estudiantes averiguar el engaño, pues Watson fue programado para utilizar eventualmente expresiones coloquiales y para responder únicamente a las preguntas en cuya posibilidad de acertar es, como mínimo, del 97%. Eso hacía que, aunque hablara menos que el resto, pareciese totalmente creíble.
Alejandra Watts
Con información de ABC.
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