El Sumario – No hay conversación entre venezolanos en la que no se toque el tema de la emigración, bien sea porque un familiar está afuera o seamos nosotros quienes lo tengamos en mente. Para muchos, salir del país representa la única manera de obtener calidad de vida, oportunidad que se ve cada vez más lejana por la crisis.
Por otra parte, y reconociendo las dificultades, hay muchos ciudadanos que no desean irse y afirman que «Venezuela es única» y por eso apuestan a no abandonar su tierra.
Uno de ellos es Diego Prada Manzano, emprendedor social y digital de 29 años, para él “la palabra clave de lo que pasa actualmente en el país es desesperanza” por lo mismo recomienda no perder la fe y «pensar en cuáles son tus talentos, las oportunidades que hay en el país para ayudar y hacer la diferencia«.
En la misma línea de pensamiento está Alejandro Torres, programador web de 25 años. «Esta situación pone a prueba mi temple, resistencia y paciencia», narra. Al mismo tiempo admite que entre sus motivos para quedarse están sus seres queridos. «Ese grupo de personas que te hacen la vida feliz; estar lejos de ellos es realmente vacío, puedo irme y tener dinero sí, tener más seguridad sí, pero me sentiría vacío».
Aconseja además prepararse lo mejor posible a nivel profesional y ser agentes de cambio. «He tenido la oportunidad de viajar a varios estados del país y he conocido gente que vale oro. Venezuela es un país con una mezcla rica de todas las culturas, acá tenemos de todo». Al mismo tiempo asegura que la próxima generación es la que más apoyo necesita. «Los que necesitan de nosotros son los niños, a eso apuesto 100%».
Prada Manzano coincide con Torres, «no es quedarse o irse, es dar el ejemplo. Venezuela nos necesita a todos y cualquier cosa que hagamos para bien va a ser valorado y formará parte del progreso».
¿Zona de confort?
En casi todas las redes sociales existen publicaciones relacionadas o que explican la denominada «zona de confort» -a la cual la psicología define como un lugar en el que el individuo se siente a salvo pues no existe riesgo alguno y generalmente tiende a ser su hogar- y cómo, para crecer, es necesario salir de ella.
Ambos profesionales aseguran que sus deseos y motivos para quedarse y perseverar nada tienen que ver con esto pues «Venezuela no es una zona de confort».
“Emigrar es muy difícil y estar en Venezuela es muy difícil también, así que no es ninguna zona de confort porque hay que reconocer que apostar a un país en crisis es complicado”, manifiesta el emprendedor social y digital.
El programador web nombra factores a considerar antes de tomar una decisión tan grande como irse del país. «La edad, responsabilidades familiares y económicas, por ejemplo. Quien dice que no emigra por miedo a dejar su zona de confort se refiere a la Venezuela de hace dos años quizás».
Al preguntarles si consideran que Venezuela es el mejor país del mundo, los dos opinan que ese título puede lograrse realmente pronto.
«No, no lo es pero sí creo que lo seremos una vez pase todo esto, definitivamente sí», dice Torres, mientras que Prada Manzano expresa “no sé si es el mejor país del mundo, pero es mi país”.
Venezuela, la apuesta de muchos jóvenes
Chistian Sequin es un venezolano que, al hablar, transmite la gran pasión que siente por Venezuela; es uno de esos criollos que “se levanta bien temprano para salir a trabajar, y seguir apostando por el país”.
Con 29 años de edad, este emprendedor innato se encuentra al frente de dos empresas: Black Matte Performance, un taller de autos y de venta de repuestos, en Guatire, creado para canalizar su pasión por los vehículos; y Llámame Lola, un local de venta de dulces, en Guarenas.
A pesar de su interés por los carros rápidos, quiso incursionar en este último proyecto de repostería con el objetivo de ofrecerle a los mirandinos un espacio confortable, único, y diferente, que los hiciera sentir “fuera de Guarenas” con propuestas irresistibles al paladar que son tendencia, según manifiestan asiduos al lugar.
Con aproximadamente tres meses de apertura, los milkshakes se han hecho populares, elaborados con galletas, junto a helados, y otros ingredientes agradables al paladar. El emprendedor se expresa con pasión, nos habla de tortas tradicionales que enamoran la vista; los cupcakes decorados; los cremosos cafés, y otras propuestas, que han hecho del lugar un rincón de encuentro diferente y agradable al cual acudir sin necesidad de salir de la localidad. Es decir, lo que se propuso lo ha logrado.
Los “frutos” de su emprendimiento han sido tan satisfactorios que estima inaugurar una sede en Guatire, en Los Teques, y otra en Caracas. Además, próximamente le dará apertura a un local estilo bar y lounge en la misma Guatire.
Al preguntarle sobre qué lo impulsó a invertir en estos últimos emprendimientos, tomando en cuenta el índice inflacionario del país, u otras circunstancias adversas, señaló que siempre existirá la duda de “ganar o perder”, sin embargo, su estrategia y, quizás la clave de su éxito y de la estabilidad de sus empresas, se basa en analizar el mercado para determinar la factibilidad del negocio, así como darle buena publicidad, y carácter “innovador”.
Su recomendación principal, insiste en ello, para aquellos que quieren desplegar sus alas en cualquier tipo de emprendimiento en el país, es tener disciplina y estudiar el mercado al cual se quiere apuntar antes de materializar el proyecto.
Constancia, trabajo, y dedicación son las tres palabras que definen a sus empresas; “son los tres pilares” que impulsan sus ganas de trabajar cada día por el país, pues él ¡se queda en Venezuela!
¡Dejar los miedos y emprender!
Yare Borges es comunicadora social de profesión, egresada de la Universidad Católica Santa Rosa (Ucsar), con formación en Search Engine Optimization (SEO), en la Universidad Central de Cataluña, España, tiene una firma empresarial, que lleva su nombre, en la cual brinda asesorías de marca personal para emprendedores, y ofrece otros servicios como gestión de redes sociales, coaching comunicacional, creación de diseño y de contenido web, y diseño gráfico.
Se define como emprendedora, y el propósito fundamental de su empresa, con dos años de trayectoria consolidada, es «ayudar a las personas a humanizar sus marcas para poder vender emociones».
A través de yareborges.com.ve se puede apreciar el proyecto materializado de esta profesional que decidió emprender este rumbo con la firme convicción de que tiene mucho que ofrecer al mundo. Además, para no dejar a un lado su pasión por la escritura, la criolla de 25 años de edad fundó el blog «Claves para vivir», un espacio que, al principio, fue concebido «con la firme intención de ayudar a los demás» mediante publicaciones relacionadas con el contenido de su marca. Sin embargo, próximamente el sitio web contará con un estilo más personal, «más intimo».
Su respuesta ante la típica pregunta que muchos venezolanos se hacen entre si: «¿Cuándo te vas del país?», dejó en claro que, a pesar de las vicisitudes, no abandonará la tierra que la vio nacer. «Para mi Venezuela es más que un país, es mi hogar, mis planes son seguir creciendo aquí y apoyar a quienes quieran emprender, solo así podremos reconstruirlo», afirmó.
Crear su propia marca, y desarrollar sus conocimientos y habilidades a través de ella, le ha permitido trabajar con importantes empresas con sello venezolano, como blindadoras o Perla Solutions. Active Media Marketing, Publika Inc, y la marca de carteras venezolanas Eleny Berrios, son algunas de las compañías en las cuales nos dice ha dejado su granito de arena o contribución profesional.
La constitución de su empresa le abrió otras puertas en el área de la comunicación. Actualmente, tiene un segmento radial que se llama Sinergia Digital, que sale al aire los últimos jueves de cada mes, a las siete de la noche, en el programa Educación renocectiva, que se trasmite a través de la emisora Radio Comunidad.
A quienes desean seguir sus pasos e igualmente emprender les sugiere dejar a un lado «los miedos», así como definir las metas y los objetivos del emprendimiento que se proponen. También recomienda «rodearse de personas» afines al proyecto para «estudiar bien la forma en la cual los gestionan, mejorar estrategias propias, y no cometer los mismos errores».
Uno nunca se va
Además de muchos titulares, dentro y fuera del país, la creciente emigración venezolana ha sido motivo de inspiración para temas musicales como el que publicó la banda Desorden Público Los que se quedan, los que se van en 2016 o el dúo San Luis junto a Voz Veis y Apache, Mis ilusiones, en 2017.
Ambas canciones reiteran el mensaje de que incluso a kilómetros de distancia Venezuela siempre estará con todos sus hijos y quien se va, en el fondo, desea volver.
Alejandra Watts / Evany Sandoval
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