Un estudio publicado por la revista Journal of Environmental Psychology sobre una investigación de la Escuela de Psicología de la Universidad de Cardiff (Reino Unido), comparó ambientes laborales donde habían plantas y donde no, descubriendo que la presencia de plantas en la oficina aumentó la participación laboral de los empleados, ya que estaban más física, cognitiva y emocionalmente involucrados en su trabajo.
Esto sucede gracias a que las plantas pueden reducir el estrés, aumentar la capacidad de atención y mejorar el bienestar general, lo que redunda finalmente en una mejora de la productividad.
Tras comprobar la percepción del personal sobre la calidad del aire, la satisfacción laboral, los niveles de concentración, así como la productividad de los meses posteriores en las distintas oficinas, los científicos comprobaron que los espacios que contaban con plantas verdes hacían que los trabajadores se sintieran más felices en su entorno de trabajo, estuviesen más concentrados y fuesen un 15% más productivos que los de las otras oficinas.
JVC
Con información de Muy Interesante
