La batería de ion-litio, ese que se usa en las computadoras portátiles y celulares inteligentes, encontró su contrincante: la de batería de aire-litio. Gracias al grafeno los investigadores de la Universidad de Cambridge lograron crear una pila que podría hacer que los carros eléctricos circulen por más tiempo, pues almacena hasta diez veces más energía y permitiría a los vehículos recorrer 600 kilómetros.
Su eficiencia resulta prometedora: necesita 3 voltios para cargarse y se descarga a 2.8, lo que supone que solo se pierda algo menos del 3% en forma de calor. Este récord supone rozar la eficiencia de las baterías de ion-litio actuales, que además son unas cinco veces más caras y más pesadas que las experimentales de aire-litio.
Los científicos, además, esperan alcanzar 2.000 ciclos de carga sin que la batería baje significativamente su rendimiento, uno de los aspectos en los que los dispositivos experimentales de litio-aire han obtenido resultados deficientes.
Una dificultad que presentan este tipo de nuevas baterías estriba en que, de momento, no pueden usar directamente el aire, compuesto entre otros elementos de oxígeno, dióxido de carbono, nitrógeno y agua; sino con oxígeno puro.
«En su forma más sencilla, las baterías están compuestas de tres componentes: un electrodo positivo, un electrodo negativo y un electrolito», explica Tao Liu, profesor del Departamento de Química de Cambridge. En su modelo, Liu y su equipo también crearon un electrodo muy poroso de grafeno.
Por su parte, Clare Grey, profesora de Química de los Materiales de Cambridge y una de las autoras del proyecto, considera que el camino hacia una batería real aún tiene obstáculos y estima que estaría lista en no menos de diez años.
AG
Con información de El País.
Fotografía Gettyimages.
