Uno de los signos más comunes del envejecimiento son las temidas “patas de gallo”: esas arruguitas que se forman en el contorno de los ojos y que figuran entre una preocupación más para las mujeres.
La piel del rostro es muy fina y delicada, por ello es la primera zona que refleja el paso de los años en forma de arrugas, bolsas y ojeras.
Retrasar la aparición de las “patas de gallo” va a ser clave para mantener un aspecto joven y radiante, para ello primero debemos saber con exactitud las causas que pueden acelerar su aparición:
- El Sol: es el gran enemigo y principal causante de las “patas de gallo”. Destruye el colágeno y reseca la piel, haciendo que ésta pierda elasticidad. Una piel seca es muy propensa a tener arrugas prematuramente.
- Una exposición a una luz fuerte: durante mucho tiempo puede acelerar la aparición de las “patas de gallo”. Nos obliga a cerrar los ojos, formándose pliegues en el contorno. Lo mismo ocurre si frecuentas sitios con una alta concentración de humo.
- Edad: sobre este factor poco se puede hacer. Con el paso del tiempo se deja de producir colágeno y la piel pierde elasticidad.
Ahora bien, siempre podremos hacer algo para retrasar su aparición, o si lo han hecho ya, al menos evitar que éstas vayan a más:
- Utilizar siempre protector solar. Debes aplicártelo tanto en el párpado superior como en el inferior, cada dos o tres horas al día.
- En caso de que no quede más remedio que exponernos al sol, debemos proteger la zona siempre que podamos con gafas.
- Evitar el contacto con el humo. Nuestros ojos tienden a cerrarse para no secarse y con ello aceleramos la formación de las “patas de gallo”.
- Mantener una buena hidratación con una crema específica también será clave.
- También puedes tirar de remedios caseros para retrasar su aparición. Por ejemplo las cápsulas de vitamina E que puedes encontrar en cualquier farmacia.
DS
Con información de Trendencias
Fotografía Gettyimages