El Sumario – Recientemente, salió a la luz un grupo de fotografías hechas por el artista israelí Shahak Shapira, quien se dio la tarea de humanizar el recuerdo a cerca de la importancia histórica y el respeto que se debe tener a la memoria de todos quienes, perdieron su vida en la Segunda Guerra Mundial.
El Holocausto nazi -en particular- no fue nada menor, se trata de una masacre planificada y a sangre fría donde bebés, niños, jóvenes, adultos, ancianos, mujeres y hombres fueron obligados a realizar tareas forzadas, a pasar hambrunas inimaginables hasta morir, a «vivir» con enfermedades fuertes y en espacios inhabitables, entre otras cosas, que ni siquiera se deben mencionar por la alta humillación que representan; incluyendo la muerte masiva en cámaras de gas.
Por eso, los espacios y museos destinados para el homenaje y recuerdo de las víctimas deben ser respetados, no sólo porque son parte de la historia universal, sino además porque representan una parte importante de las raíces o cultura de millones de personas en el mundo.
Sin embargo, hay muchos que dejan por sentado que la moda es más importante y el capturar un momento también. Por lo que asisten al monumento de las víctimas del Holocausto en Berlín y se toman fotografías que no son aptas para el hecho, olvidando que debajo de esas «piedras» hay más que historia.
Dadas las circunstancias de irrespeto, o por lo menos falta de consideración, el artista Shapira realizó montajes con fotos reales, de quienes visitan el espacio antes mencionado, y las unió a lo que sucedió entre esos años de sufrimiento. Como resultado obtuvo imágenes realmente impresionantes, con las que espera las personas reaccionen y tomen un poco de consciencia. Es decir, mover a la reflexión.
Yolocausto
Yolocausto nace como una manera de frenar la falta de respeto de los turistas al monumento de las víctimas del Holocausto en Berlín. La palabra es una abreviatura de las iniciales de «You Only Live Once«, por eso el Yolo. De igual manera, en castellano tiene sentido con el «YO» de los selfies.
El artista escoge las imágenes al azar por medio de Internet, sin borrar los rostros reales de las personas. No obstante, Shapira no coloca el nombre ni apellido del sujeto en cuestión, porque en el proyecto no se trata de humillar a nadie sino de crear consciencia en las personas a cerca del respeto que deben tener e inculcar en las generaciones futuras.
Shahak Shapira, no pide permiso para usar las fotografías, pero destaca en su página web que retirará los montajes que sean solicitados.
La idea que está desarrollando es prometedora, este artista reconoce que no puede decirle a las personas qué hacer o no. «Todo el mundo tiene que decidir por sí mismo, pero voy a hacerles pensar. Las imágenes muestran cómo puede olvidarse la memoria. Muchos ven el memorial nada más como un conjunto de objetos y fotos y menos como un lugar para el ejercicio de la memoria cultural.»
Observa en la galería, algunas imágenes realizadas por Shahak Shapira.
Angélica Rodríguez.
Con información de VozPópuli.
