Álex Mejía, coaching empresarial, asegura que antes de adquirir una deuda lo primero que debe tener en cuenta es organizar un presupuesto en el que destine máximo un 30% de sus ingresos en su pago. “Pasar esa cifra le podría acarrear una serie de inconvenientes futuros”, agrega.
Las deudas son obligaciones fundamentales, que no puede pasar por alto cada vez que recibe ingresos. Aprenda cómo priorizar su pago y asalir de ellas lo antes posible.
- Clasificar deudas: Establezca prioridades, clasifique las deudas con los más altos intereses y evite atrasos. Es mejor que pague los créditos hipotecarios primero, así no solo se evitará un embargo sino que se quitará un peso de encima cuando termine de cancelarla.
- Priorizar pago de educación: Luego, siga con deudas como el colegio de sus hijos y alimentación, pues son imprescindibles en su vida diaria.
- Pague deuda a naturales: Finalmente, pague sus deudas con el amigo que le prestó, su tío o su papá. Su credibilidad está en juego, además de que no sabe cuándo los pueda volver a necesitar.
- Dar la cara si no tiene cómo pagar: Es posible que un deudor no tenga cómo pagar la deuda pendiente, ahí es cuando se recomienda que den la cara, que se acerquen a las entidades financieras y se logren acuerdos de pago, con el fin de que los intereses no sigan subiendo. Si una entidad financiera percibe su voluntad de pago, será una ventana que se abre.
- Evitar gastos innecesarios: La regla de oro, en la organización de sus obligaciones, es apretarse el cinturón: si quiere pagar rápido una deuda no gaste de más.
- Usar Excel: Aunque parezca un tendero, registre las deudas en un cuaderno o en una hoja de Excel. La idea de anotar cuánto gasta resulta graciosa para algunos, pero es la mejor manera de llevar un registro y de recordar qué debe pagar.
AG
Con información de El Mundo.
Fotografía Gettyimages.
