Aunque se sufran, a nadie le gusta hablar de sus problemas intestinales. Sin embargo, quienes tienen seguido fuertes espasmos abdominales y diarreas durante periodos largos, deberían consultar con un médico, ya que detrás de estos síntomas podría haber una enfermedad inflamatoria intestinal. Las más comunes son la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa.

Por ahora, no se sabe a ciencia cierta qué desata las enfermedades inflamatorias intestinales crónicas. Al parecer, juegan un papel importante los cambios de hábitos, pero también son relevantes factores genéticos.

Tampoco se sabe si un determinado estilo de vida influye en forma positiva o negativa en su transcurso. Y aunque se trata de una enfermedad que no se puede prevenir, se pueden dar pautas a los pacientes para que lleven adelante una vida relativamente normal.

Algunos especialistas recomiendan platos tradicionales, naturales, que no exijan muchos esfuerzos de preparación. Básicamente uno debería comer lo que le gusta, pero evitando comidas precocinadas y alimentos muy procesados.

Para sentirse bien, también es importante que los amigos y familiares de los afectados se manejen bien con la enfermedad. El círculo íntimo debe entender que quien tiene la enfermedad dno puede participar en todo. Para muchos de estos pacientes, emprender excursiones donde no hay cuartos de aseo cerca puede ser una pesadilla.

En el caso de quienes sufren la enfermedad de Crohn deberían dejar de fumar de inmediato. Además, cuando se sienten bien, los pacientes deberían llevar adelante una rutina saludable que los fortalezca, haciendo deportes y ejercicios de relajación y alimentándose bien.

Lo más recomendable es que ante los primeros síntomas se acuda a un especialista para que indique la terapia adecuada y no tener que llegar a una operación por no haber tratado el problema a tiempo.

EC

Con información de dpa.

Fotografía Gettyimages.