Aunque el abridor Jake Arrieta fue el gran héroe del triunfo de los Cachorros de Chicago ante los Piratas de Pittsburgh, el receptor venezolano Miguel Montero no se quedó atrás y logró conectar uno de los siete imparables que ayudaron al triunfo.
El venezolano hizo cuatro viajes a la caja de bateo y pegó una vez, no remolcó carrera ni pisó la registradora, y dejó en .250 su promedio con el tolete.
Con esta victoria, el equipo entró a la serie de división del Viejo Circuito para enfrentarse a los Cardenales de San Luis a partir del viernes.
AG
Con información de Analítica.
Fotografía Charles LeClaire-USA TODAY Sports.