El Sumario – Las toxinas del humo del tabaco que se inhalan van a parar al torrente sanguíneo y se reparten por todo el cuerpo, incluso en los ojos, lo que puede provocar diferentes problemas oculares que pueden ocasionar la ceguera, según advierten expertos del Instituto Catalá de Retina.

Con motivo del Día Mundial Sin Tabaco, que se celebra este viernes 31 de mayo, el consumo de tabaco puede incrementar el riesgo de sufrir cataratas, «la patología que aparece con mayor frecuencia entre los fumadores».

Entérate de más: El melanoma puede desarrollarse por excesiva exposición solar

Asimismo, los elementos tóxicos que incorpora el tabaco también aumenta las posibilidades de padecer degeneración macular asociada a la edad (DMAE), donde «una parte de la retina queda dañada y provoca pérdida de visión central«. «Hay que recordar que no existe ninguna cura para esta enfermedad, aunque hay tratamientos que frenan su avance», alertan.

El tabaco puede afectar «seriamente» el nervio óptico, que es el que conecta el ojo con el cerebro. «Un problema en esta zona tan vital puede degenerar en ceguera», advierten. Asimismo, insisten en que un grupo de riesgo son los diabéticos que también son fumadores, ya que «tienen más posibilidades de sufrir una retinopatía diabética, es decir, que los vasos sanguíneos del ojo quedan dañados».

«El tabaquismo está especialmente contraindicado en aquellas personas que tienen el ojo seco porque a la falta de lágrima que genera la persona que sufre patología hay que añadir que el humo potencia la sequedad y la irritación oculares«, se argumentó en el estudio.

Angélica Rodríguez

Con información de dpa