Tras un 2017 donde reinaron como el mejor conjunto FIBA del año, los Guaros de Lara irán con todo lo que tienen para seguir siendo el equipo a vencer

El Sumario – Posiblemente el año 2017 haya sido el más prolífico para el quinteto venezolano Guaros de Lara, tras cosechar cuatro de los cinco títulos que disputó. Un año que permitió ratificar su condición de «grande» en la región sudamericana.

El equipo larense logró ganar dos nuevos títulos y repitió en otros, cosechando el reconocimiento dentro (equipo profesional del año) y fuera de nuestras fronteras (designado equipo FIBA del año).

El mejor de América… otra vez

El conjunto crepuscular había logrado una hazaña en el 2016, ser el primer campeón venezolano de la Liga de las Américas. En el 2017, se plantearon descartar la tesis de que su logro fue fruto de la casualidad y demostrar que era resutado del trabajo y el talento como grupo.

Qué mejor manera de hacerlo, que alzando la copa por segundo año consecutivo, en un hecho sin precedentes, en una noche de marzo, donde derrotaron a Weber Bahía de Argentina, con una rotunda pizarra de 88-65 para sellar la gloria continental de la mano del estratega Jorge Arrieta, el primer mandamás técnico del año, sucesor de Néstor «Ché» García, a quien recordó y dio el crédito.

Profetas en su tierra

Guaros es una institución que en los últimos cinco años demostró ganas por su desarrollo y crecimiento. La sana ambición deportiva es palpable en cada palabra de su máximo dirigente, Jorge Hernández, y poco a poco se han puesto de manifiesto esas intenciones sobre el tabloncillo, así como el sólido deseo de triunfar, sin importar los intérpretes o estrategas de turno.

Tras la salida de «Ché» García y Arrieta, a mediados del 2017 se incorporó el argentino Guillermo Vecchio, viejo conocido de la casa, para tomar las riendas del equipo frente al importante reto de ser profetas en su tierra y ganar el título doméstico que se le hacía esquivo: el Campeonato de la Liga Profesional de Baloncesto.

Con gallardía, firmeza y regularidad, los crepusculares triunfaron en cada etapa de la temporada 2017 del baloncesto criollo. Una de las grandes pruebas fue despachar nada menos que en la serie por la Conferencia Occidental al campeón defensor de la liga, Cocodrilos de Caracas, en su propia casa.

Posteriormente la ratificación de su favoritismo se plasmó en la serie final de campeonato 4-2 contra el potente club Marinos de Anzoátegui, dejando claro que Guaros es un equipo de consistencia y respeto en Venezuela, al cumplir con esa tarea pendiente.

El espacio vacio finalmente fue ocupado

Tras el tropiezo en la final de la Copa Intercontinental ante el conjunto Iberostar Tenerife, los Guaros de Lara iniciaron una nueva etapa bajo las órdenes del recién incorporado Fernando Duró, un entrenador argentino que ya contaba con una experiencia previa en Venezuela con Marinos de Anzoátegui.

Gregory Echenique, uno de los baluartes del quinteto crepuscular

«La expectativa de esta organización es ser líder en América, trascendiendo y manteniendo un excelente desempeño en las ligas internacionales y tratar de tener el mejor programa deportivo, que es lo que vengo a trabajar», fueron las primeras palabras y retos de este estratega argentino.

Con poco tiempo de preparación disponible para el nuevo entrenador llegaría la fase preliminar de la Liga Sudamericana, el único trofeo que aún le quitaba el sueño al equipo y a su presidente Jorge Hernández (propietario de Guaros de Lara). Pese a los pequeños contratiempos, Duró logró sacar la mejor cara de los jugadores y salir invictos en esta etapa, al derrotar a Estudiantes Concordia (75-73), Malvin (69-81) y Universo/Vitoria (62-89).

Conforme pasaron los días, y gracias a las nuevas incorporaciones, el conjunto crepuscular fue engranándose cada vez más a las exigencias que el coach venía presentando, conforme fueron pasando los partidos de la Liga Nacional de Baloncesto y también con cada vez menos tiempo para la siguiente fase de la LSB, la cual tendría como sede la fortaleza larense: El Domo Bolivariano de Barquisimeto.

La expectativa y empeño de ir a la gran final se hicieron ver en los rostros de la directiva, entrenadores, jugadores y fanaticada. Desde el primer momento se supo que los rivales harían que esta serie fuese complicada y, pese a que los Guaros se fueron invictos también aquí gracias a las victorias ante Cimarrones del Choco (77-74); Aguada de Uruguay (67-80) y Quilmes de Argentina (88-85 con tiempo extra), en muchas instancias de cada uno de los encuentros se pensó que el sueño se quedaría apenas a la mitad del camino.

Ahora bien, la última prueba de los larenses llegaría apenas 20 días después del tan sufrido juego ante Quilmes. Los Guaros tuvieron que enfrentarse entonces a un viejo conocido de la fase previa, Estudiantes Concordia quien quería sacarse esa espina del encuentro perdido ante los venezolanos.

Los primeros dos encuentros serían entonces en el Domo, donde los crepusculares salieron victoriosos de ambos compromisos pero con marcadores muy cerrados (77-74 y 88-83) y encuentros muy sufridos que fueron sacados adelante gracias a los esquemas de juego establecidos por el hasta ahora invicto Fernando Duró.

La segunda parte de esta historia final no tuvo un grato comienzo para los venezolanos ya que por primera vez, y tras más de 10 partidos invictos, los Guaros de Lara cayeron ante Estudiantes en Argentina por 74-68 con lo que la serie se ponía 2-1 aún a favor de los crepusculares.

Heissler Guillent se erigió como el Jugador Más Valioso del certamen

Ya para el segundo encuentro, los Guaros estaban en la obligación de ganar para salir campeones, ya que si perdían se verían obligados a regresar nuevamente a Barquisimeto para jugar un quinto y último encuentro. La historia y el triunfo estuvieron en esta ocasión en el lado venezolano ya que los larenses salieron victoriosos por 79-82 y se convirtieron en el primer equipo criollo en conquistar este torneo.

Además, entre otros reconocimientos como el MVP del torneo para Heissler Guillent, la organización presidida e impulsada por Jorge Hernández y su familia, fue reconocida como el equipo FIBA del año 2017 y también se convirtieron en los reyes de copas en Sudamérica al ser el único conjunto en coronarse en todas las competiciones posibles (Liga Nacional, Liga Sudamericana, Liga Profeional de Baloncesto, Liga de las Américas y Copa Intercontinental).

Los reyes de la LNB vuelven al trono

Ya en el torneo local, los crepusculares dominaron en cada uno de los encuentros a los distintos rivales que enfrentaron en esta edición 2017 de la Liga Nacional de Baloncesto. La última etapa de este torneo fue ante el siempre fuerte Cangrejos de Monagas, quienes lograron arrebatarle el invicto a los de Duró en esta LNB.

Con dicho campeonato, los larenses sumaron a sus vitrinas su cuarto título de la LNB de la mano de una generación de jugadores que se han dedicado en alma y corazón a llenar de trofeos sus vitrinas en Barquisimeto y a dejar el nombre de Venezuela en lo más alto de la élite del baloncesto mundial.

2018: Repetir la hazaña y mantenerse en la élite

Luego del descanso por las fiestas navideñas y de fin de año, y con la mira enfocada en repetir y mejorar cada una de las hazañas logradas en 2017, los Guaros de Lara fueron convocados a incorporarse a los entrenamientos desde el 9 de enero en las instalaciones del Domo Bolivariano de Barquisimeto.

En primera instancia, su objetivo es salir victoriosos de la primera fase de la edición 2018 Liga de las Américas donde los larenses formarán parte del grupo D junto a Baurú (Brasil), San Salvador BC (El Salvador) y Correcaminos de Colón (Panamá). Se prevé que los encuentros de esta fase, se lleven a cabo entre el 9 y 11 de febrero.

Asimismo, Guaros pretende repetir glorias en la LPB, LNB y Liga Sudamericana con la base victoriosa de 2017, para continuar como equipo referencia del baloncesto, no sólo en Venezuela sino en el continente americano.

Todos sus directivos, gerentes y técnicos, encabezados por Jorge Hernández, se alinean y trabajan con los jugadores para seguir reinando como el equipo más ganador de América y lograr también mantener uno de los títulos más importantes que cualquier divisa deportiva en el ámbito mundial puede anhelar: ser el conjunto a vencer en todas partes.

Carlos Escalona / Krystian Tovar

Especial – ElSumario.com