Danzas, cantos y rezos en medio de caravanas de colores y disfraces estrambóticos celebran el Día de los Inocentes en el oriente venezolano

Este 28 de diciembre las calles de Sanare en el estado Lara se sumergen en cultura y tradición para recibir la fiesta de la Zaragoza. Disfraces de múltiples colores, estrambóticas máscaras e infinidad de hombres con singulares atuendos que bailan al son del tamunangue se apoderan cada año del espíritu larense. La celebración es una fiesta religiosa en el marco del Día de los Inocentes.

El despliegue cultural evoca la locura de las madres que perdieron a sus hijos, luego de la matanza ordenada por el rey Herodes. Los zaragozas (hombres vestidos con trajes y máscaras multicolores) salen a danzar todos los 28 de diciembre en Sanare, ciudad de Los Andes venezolanos situada a 65 kilómetros de Barquisimeto.

Así se vive el Día de los Santos Inocentes en Lara, un evento que ha sido reconocido internacionalmente por su colorido y tradición. Bernabé Alvarado, uno de los Capitanes Mayores de la fiesta, asegura que “muchas de las personas disfrazadas de zaragozas cumplen promesas concedidas a favor de sus hijos, sobrinos y nietos”.

La tradición de la Zaragoza tiene más de 200 años de antigüedad, pero no se conoce con certeza por qué se inició en Sanare, capital del municipio Andrés Eloy Blanco, uno de los principales productores de café del país.

La fiesta comienza de madrugada en la casa de María Elvira González, capitana mayor de esta fiesta religiosa y guardiana del cuadro de los Santos Inocentes. Ahí beben café y comen pan dulce a las 3:30 de la madrugada para luego comenzar con los primeros rezos. Posteriormente en la iglesia del pueblo de Sanare se oficia la misa de las 10:00 de la mañana, que da inicio formal.

La diversidad cultural en Venezuela es lo que nos hace un país de gloria, este lunes 28 de diciembre el turno es de los larenses y su Zaragoza en honor a los inocentes caídos.

YR

Con información de Correo del Orinoco.