La patilla es buena para el cuerpo y para el cutis. A pesar de ser tan sabrosa y tan dulce, contiene muy poca azúcar y no hace engordar ya que 100 gramos de patilla madura tienen alrededor de 40 calorías, debido a su gran contenido de líquido.

Además, aporta mucho calcio y beta-caroteno, el cual se convierte en vitamina A dentro del cuerpo y es buena para la piel y los ojos.

La patilla pertenece a la familia de las cucurbitáceas, de la que también forman parte los pepinos, las auyamas y los calabacines.

A la hora de comprarla, lo ideal es saber determinar el grado de madurez de la fruta. Como se ve en los mercados, el secreto está en reconocer qué tipo de sonido hace cuando se le da un golpecito.

Si el sonido es bajo y seco, es hora de comerla. En cambio, si resuena hueco y bajito, la fruta aún está verde.

No es bueno conservarla mucho tiempo en la nevera porque pierde el sabor y absorbe los aromas de otros alimentos.

AG

Con información de dpa.

Fotografía Monique Wüstenhagen / dpa-tmn.