El Sumario – Cocinar es todo un arte. Hay quienes nacen con el don para desempeñarse de manera extraordinaria en la preparación de recetas -bien sean dulces o saladas– y hay otros que aprenden a dominar estas destrezas con la práctica y con el tiempo.

Dayana Vásquez es comunicadora social y productora audiovisual de profesión, además de pastelera por tradición familiar, pasión, así como amor a la cocina. Además usa sus talentos como una alternativa de trabajo adicional en tiempos de crisis, periodos en los que dicen que surgen las mejores ideas, soluciones, proyectos y emprendimientos.

Tortas de diferentes sabores son las delicias que ofrece al público, entre las que más destacan el ponqué hecho y relleno de chocolate cubierto con arequipe; también prepara una torta rellena y cubierta de chocolate, que fue la propuesta con la cual inició; brazos gitanos; y la popular Red Velvet, también conocida como Terciopelo Rojo, un bizcocho de tintura roja en donde el queso crema es el protagonista.

La comercialización de sus preparaciones comenzó boca a boca en el periódico en donde ejerce su vocación. A partir de allí, las exquisiteces comenzaron a hablar por sí solas, sin necesidad de hacer campaña para dar a conocer su emprendimiento.

La torta de piña, la tres leches, de jojoto, la combinada con quesillo, y otras elaboraciones prácticas, y un tanto criollas, pronto se sumarán a la carta.

¿Cómo iniciaste en este mundo?

“Crecí en una familia de reposteras, mi mamá y mis tías se dedicaban a preparar hasta 60 tortas. Aprendí viendo cómo se mezclaban los ingredientes. Además, tengo primos que sí son reposteros de profesión, y les preguntaba cómo se preparaban ciertos dulces, y viendo sus cuentas en Instagram”.

-¿A qué edad realizaste tu primer dulce?

“Comencé a cocinar a los 15 años, siempre hacía pastichos y pollo. Sin embargo, mi primera preparación la hice a los 26 años, y fue una torta marmoleada, que, incluso, me pareció difícil de hacer.

-¿Cuándo comenzaste a comercializar tus preparaciones?

“Inicié este año. Recuerdo que hice varias recetas en mi casa e invite a mi hermano a mis primos,  y el resultado fue bueno, les gustó. Allí fue cuando dije: Voy a ver cómo me va”.

-¿Tienes algún gurú de la cocina?

“Sigo a César González (@co_cinero) a través de su página web. Es un chef venezolano emprendedor que es socio fundador de varios restaurantes en Miami, como Bocas House, y Bocas Grill. La mayoría de las recetas que he realizado las tomo de allí, quedan perfectas”.

-¿Eres de las que sigue las recetas al pie de la letra?

“Siempre le agrego mi toque personal, sea con las tortas o con cualquier preparación. Lo hago para complacerme”.

-El libro Como agua para chocolate, de Laura Esquivel, hace referencia a que el estado de animo de quien cocina se transmite a las preparaciones, ¿crees que sea cierto?

“Me ha pasado que si estoy molesta, la comida me queda mal, mientras que, cuando cocino con amor, me queda mucho más sabrosa”.

-¿Cómo equilibras tu vida profesional y personal con este hobbie?

“Principalmente con la ayuda de mi mamá, de mi esposo, y de uno de mis hermanos. Él, por ejemplo, me ayuda con la compra de ingredientes cuando los ve disponibles en los anaqueles, como la mantequilla, por lo que siempre trato que haya un postre para él», dijo con sonrisa pícara.

-¿Cómo defines tu hacer en tres palabras?

“Es un escape; cuando preparo las tortas no pienso en nada más. También es creatividad, pues, a mi juicio, para ser cocinero hay que ser creativo. La palabra ‘cariño’, también lo define, a cualquier cosa que te dediques debes hacerlo con amor”.

-¿Cuáles son tus consejos para aquellos que quieran iniciar en este tipo de emprendimiento?

“Principalmente hay que tener paciencia, porque no siempre la receta sale bien, u omites echar un ingrediente. No se debe tirar la toalla a la primera equivocación. Hay que investigar y dedicarle tiempo”.

-¿Y cómo haces cuando un postre no quedó como querías?

“Se lo come mi familia (risas).”.

-¿Si tuvieses que colocar un nombre a tu emprendimiento, ¿cuál sería?

“Aún no he pensado en eso, pero sin duda tendría relación con lo familiar. Mi mamá, mi esposo y mi hijo son mis pilares y lo más importante para mí. Hago esto por ellos, para que estén bien.”.

A futuro Vásquez tiene planeado dedicarse plenamente a este dulce hacer, así como dar a conocer sus preparaciones a través de las redes sociales. Pronto incursionará en la elaboración de opciones saladas, como cachitos y golfeados, pues, constantemente, sus clientes le piden que prepare nuevas recetas.

La invitación es a probar sus preparaciones por encargo y deleitar el paladar con dulces hechos con amor venezolano. Pueden contactarla a través de su cuenta oficial en Istagram: @dayanamvv, o mediante su correo electrónico [email protected].

Evany Sandoval.