Conoce los nueve platos patrimonio de la humanidad

Como cada año desde 2008, la Unesco elabora una lista de tradiciones procedentes de diferentes partes del mundo que conforman el patrimonio intangible de la humanidad. Y en esa selección incluye los procesos de producción de alimentos típicos.

El plato en sí mismo no es el que se lleva el honor, por muy bueno que sepa al paladar: es el proceso, «la práctica y el arte» de prepararlo lo que el órgano cultural de las Naciones Unidas considera que se debe preservar para la posteridad. En estos seis años, la Unesco ha incluido en su selección sólo nueve tradiciones culinarias.

Este año se anticipa que debutarán otras tres: el kimchi de Corea del Norte, el café árabe y la salchicha de cerdo Kranjska klobasa, que Eslovenia registró como «denominacion de origen» pese a los reclamos de Austria, Croacia y Alemania.

Te invitamos a conocer los platillos que conforman la selección… pero no te garantizamos que no te dé hambre:

  • Comida mexicana al estilo de Michoacán: los platos tradicionales mexicanos no entraron en la selecta lista solo por su mezcla exquisita de ingredientes, sino por ser un «modelo cultural integral» que incluye aspectos como la agricultura tradicional, prácticas rituales y costumbres comunitarias ancestrales, según destacó la Unesco.
  • Kimchi: es de Corea del Norte es una flamante adición a la lista, una vez que la Unesco lo confirme en su reunión anual, la próxima semana. El plato nacional coreano es una preparación de vegetales cocidos, principalmente repollo, sazonados con especies y mariscos fermentados.
  • Pan de jengibre: la tradición croata de hacer pan de jengibre se remonta a la Edad Media, cuando las galletas eran horneadas en monasterios y, más tarde, en las casas de los artesanos, principalmente en la región norte de la nación europea. La receta básica de harina, bicarbonato de sodio, azúcar y especies es conocida por todos.
  • Washoku japonés: la washoku, cuya traducción literal es «cocina japonesa», fue incluida en la lista en 2014, cuando los expertos culturales le reconocieron su «espíritu esencial de respeto hacia la naturaleza». La cocina nipona tradicional se basa en ingredientes locales como arroz, pescado, vegetales y plantas silvestres comestibles.
  • Café turco: es la combinación de las técnicas de macerado y reposo junto con la cultura comunitaria en torno a la taza lo que ayudó a posicionar el café turco en la lista del patrimonio intangible del mundo. La bebida, elaborada lentamente en jarras de cobre sobre una hornilla, es densa, espumosa y dulce y se sirve en pequeñas tazas.
  • Lavash de Armenia: es un pan integral delgado y ovalado típico de la cocina armenia, que es preparado por grupos de mujeres: las más jóvenes de las familias ayudan en su elaboración y asumen la responsabilidad conforme avanzan las generaciones.
  • Dieta mediterránea: se trata de un patrimonio que se extiende por varias culturas y países y cuya inclusión en la lista de la Unesco contó con el apoyo de Grecia, Chipre, Croacia, España, Italia, Portugal y Marruecos. Aclamada como una opción saludable y una apuesta a la longevidad.
  • Lentisco de Chios: el lentisco, entina o mata charneca, cultivada en la isla griega de Chios, proporciona una resina translúcida que se vuelve rígida y quebradiza cuando se seca al sol. La aromática mastiha sirve para numerosos propósitos, desde sus usos medicinales hasta propiedades de embalsamiento ya conocidas por los antiguos egipcios.
  • Comida gastronómica de Francia: «la comida gastronómica de Francia es una práctica social para celebrar momentos importantes en las vidas de las personas», indicó la Unesco. En 2010, ese órgano de las Naciones Unidas resaltó el elemento de cohesión alrededor de la mesa francesa en una ocasión especial como un cumpleaños, una boda, un aniversario u otra reunión.

KYL

Con información de BBC Mundo.

Fotografía Gettyimages.