Las criollas son siempre referencia a nivel mundial por su belleza natural pero además de eso, es necesario para ellas estar de punta en blanco en todo momento

El SumarioVenezuela es conocida globalmente por “tener a las «mujeres más bellas del mundo» y claro, es una afirmación que ha sido confirmada incluso por expertos en los certámenes de belleza a lo largo de la historia.

Siete coronas universales y más de 60 reinas criollas, certifican que la mujer venezolana no solo es bella sino que además, necesita mantenerse siempre así.

Dayana Mendoza coronando a la también venezolana, Stefanía Fernández

Si se observa detalladamente a las mujeres en cualquier calle del país, incluso si se encuentra fuera de los límites de Venezuela, más del 70% de criollas se encuentran en toda ocasión impecables y con esto no es necesario referirse a un vestido de lentejuelas para ir al trabajo, sino a que es infaltable al menos un poco de labial y un peinado que disimule el ajetreo diario, como dirían por ahí “antes muertas que sencillas”.

Entonces, ¿es una necesidad de la mujer venezolana “verse bien” en todo momento? La socióloga Carmen Rodríguez, egresada de la Universidad Central de Venezuela (UCV), indicó que la necesidad de verse impecable o de verse bonita es innata en todas las mujeres.

Explicó, que se trata de una necesidad de ser aceptada por sus semejantes, de “encajar” pero aún más importante, y es lo que las mujeres no notan, es que se trata de una necesidad de sentirse mejor consigo mismas.

En el caso de las venezolanas, es exactamente lo mismo pero la situación y la presión es aún mayor ya que ellas viven “en un país de reinas”, en “el país de las mujeres más bellas”.

“En un país donde los certámenes de belleza son tan importantes, donde las reinas son tan comunes, es casi una necesidad para la mujer venezolana verse bonita, arreglada, que cuando camine por la calle la vean, la celebren y muy importante, sentirse admirada”, afirmó la experta.

Necesidad de una miss

Graciela Humbria, es una licenciada en Comunicación Social que durante su último semestre académico participó en el certamen Miss Miranda, incluso, compartió pasarela con la actual Miss Venezuela Keisy Sayago en el mismo concurso.

De primera a la derecha, Graciela Humbria durante su participación en Miss Miranda

Al preguntarle a la participante mirandina sobre la necesidad de las venezolanas en verse bien, sobretodo en este tipo de concursos, expresó que se trata de seguridad personal.

Humbría, aseguró que verse bien sí, es mantenerse de punta en blanco pero sobretodo transmitir lo que siente una mujer, en este caso transmitir que se siente bella y segura de sí misma durante el concurso o fuera de él.

Reiteró la afirmación de Rodríguez en cuanto a la necesidad de las venezolanas pero explicó que este “requisito” es aún más notable en la mujer criolla debido a las mezclas culturales que hacen a las venezolanas lo cual influye en que sean más coquetas.

Asimismo, agregó que el vivir “en país de reinas” influye claramente pues desde pequeñas, las mujeres escuchan la típica frase: “cuando seas grande serás Miss Venezuela” y esa aseveración permanece de manera inconsciente en la mente de todas.

Verse bien en tiempos de crisis

La socióloga, explicó que pese a la difícil situación económica que atraviesa el país, las mujeres continúan destinando parte de sus ganancias mensuales para sus cuidados personales entre ellos peluquería, manicure, etc.

Pese a la crisis, los cosméticos son imprescindibles para una venezolana

“Por muy humilde que sea una mujer, siempre tendrá tiempo y dinero para arreglárselas si de su apariencia se trata”, explicó agregando que aunque no sea con la misma frecuencia siempre es posible para una mujer venezolana un “cariñito mensual o trimestral”.

Gersson Moreno, vendedor de cosméticos, reafirmó lo mencionado por Rodríguez indicando que sus clientas “siempre tienen algo que comprar”.

Explicó que al llegar con nuevos labiales, iluminadores, compactos y otros productos, “las mujeres se vuelven locas” y siempre adquieren algo.

Moreno, expresó que con el clásico “se paga en dos partes”, las motiva aún más y aunque por cuestiones de inflación todo aumenta, ellas afirman que “para ser bellas hay que ver estrellas”.

Sin duda, las mujeres venezolanas tienen una marcada necesidad por mantenerse impecables en todo momento y aunque la situación en ocasiones se los impida, ellas siempre harán hasta lo imposible por “verse bellas”.

Katriz Luna