Si se tiene un conejillo de indias como mascota, no se debería dejar nunca que suba a mesas, cómodas u otros muebles altos cuando no se lo está observando, ya que no tienen una buena visión espacial y no reconocen bien los escalones y los bordes de las mesas.
Si, por ejemplo, un niño subió al cobayo a la mesa del jardín para jugar, los adultos deben observar la escena, ya que el animal podría caerse y resultar gravemente herido.
Dado que -al igual que los antílopes, los conejos y los caballos- son animales que huyen cuando perciben el peligro, son capaces de detectar los movimientos más mínimos, pero no tienen buena visión espacial.
AG
Con información de dpa.
Fotografía Gettyimages.