Pese a la crisis, José Miguel Gianelli abrió un estudio de tatuajes para satisfacer la creciente demanda del servicio en Venezuela

En un país donde la adversidad económica está presente en el día a día, aún hay personas que apuestan por hacer crecer a Venezuela desde su espacio de trabajo. Ese es el caso de José Miguel Gianelli, un diseñador gráfico que ha decidido montar un negocio en base a una industria que ha crecido no sólo dentro de nuestras fronteras, sino en todo el mundo: el arte corporal.

Él es el fundador de CreArt Tattoo Studio, un lugar donde la visión artística, el profesionalismo y la organización se integran para ofrecer un servicio de alta calidad a todas aquellas personas que quieran plasmar arte su piel. Su pasión por los tatuajes y su cercanía con el arte lo llevaron a hacer realidad esta idea.

Y es que un tatuaje es para toda la vida. Por eso, José Miguel abrió en febrero de este año un espacio en Chacao que cuenta con la atención de cinco profesionales del arte corporal en distintos estilos de tatuaje, que tienen hasta 20 años de experiencia.

Comprometidos con su trabajo, cada artista establece una conexión con el cliente para que la calidad, la estética y el detalle sean determinantes; creando una obra única e irrepetible que simbolice una huella en la vida, con un significado y sentimiento especial en quien la lleve.

La motivación para el negocio

José Miguel comenta que el servicio del mundo del tatuaje en general no es bueno (no solo aquí, sino en otras partes del mundo). No sólo porque muchos estudios no tienen profesionales que manejen distintas áreas del tatuaje, sino que, por diversos motivos, poseen poco personal y eso deriva en que las citas para tatuarse sean muy lejanas en el tiempo. Incluso, a veces no hacen una propuesta original.

Basado en estas debilidades del mercado, creó un estudio que se distingue por la buena atención, tiempo de respuesta y variedad de profesionales, brindando así un servicio integral que va más allá de lo artístico. Experiencia, talento, originalidad, creatividad y libertad son algunas de las palabras que definen lo que José Miguel conceptualizó en algo más que una tienda, convirtiéndolo así en un estudio profesional del tatuaje.

Una inversión con visión a futuro

José Miguel considera que la industria del tatuaje ha crecido, en parte, por la existencia de programas de televisión que han derribado el tabú del arte corporal. Y aunque un tatuaje es un lujo y no una necesidad, en Venezuela también ha crecido porque la crisis motiva a algunas personas a querer hacer algo que perdure toda la vida. Un tatuaje es una de esas cosas. Las motivaciones pueden ser distintas, pero clientela dispuesta a tatuarse, siempre hay.

Existe la idea de crecimiento. Si CreArt Studio Tattoo cumple con las expectativas, José Miguel visualiza la expansión de su negocio tanto físicamente como en recursos humanos. Y esto sólo es posible bajo su visión optimista del país: en Venezuela siguen existiendo oportunidades de crecimiento. Si te esfuerzas y trabajas duro, puedes sacar adelante una idea que dé frutos a pesar de las circunstancias del país. En sus propias palabras: “en el arte y en lo que uno desea, no hay limitaciones”.

Si concibes el tatuaje como un estilo de vida o piensas hacerlo, visítalos en Chacao, calle La Joya, edificio Guaica, P.B, Local A. Allí vivirás la experiencia de la mejor atención integral y artística que puedes encontrar en Caracas con el estilo que más te guste.

Eimy Cauterucce

Fotografías cortesía CreArt Tattoo Studio.

Pese a la crisis, José Miguel Gianelli abrió un estudio de tatuajes para satisfacer la creciente demanda del servicio en Venezuela
CreArt Tattoo Studio cuenta con 5 profesionales especializados en diferentes estilos de tatuajes (Cortesía CreArt Tattoo Studio).