«Para mayor información lea el prospecto o consulte a su médico». La frase se ha dicho en miles de publicidades de productos farmacéuticos, pero leer el folleto que acompaña los medicamentos no siempre resulta una tarea sencilla.

Hay quienes, al leer la larga lista de posibles efectos negativos, se sienten abrumados, inseguros e incluso llegan a sentir esos síntomas. En ese caso se está ante la presencia de un efecto nocebo, el cual se produce por una actitud negativa hacia la terapia, por temor o por malas experiencias del pasado.

La psiquis tiene una importante incidencia en lo físico, y su efecto no siempre es positivo. Por ejemplo, si en el folleto de un medicamento se indican dolores de espalda como posible efecto colateral, hay quienes realmente los sienten por el sólo hecho de haberlos esperado. En algunos casos esos temores también pueden llevar a que algunos pacientes decidan no continuar con un tratamiento.

Un equipo de la Clínica de Neurología de la Universidad alemana de Essen está enfocado al estudio del efecto nocebo y del placebo. La profesora Ulrike Bingel señala que los efectos del nocebo suelen ser subestimados con frecuencia a la hora de evaluar el fracaso de un tratamieno médico. Sin embargo, es importante que los posibles efectos colaterales sean mencionados en cada producto. Además, es una obligación legal.

AG

Con información de dpa