El Sumario – El cáncer constituye la segunda causa de muerte mundial, después de las enfermedades cardiovasculares, y su incidencia aumenta cada año. Por ello, los habitantes del mundo se unen un día al año para darle un alto a esta enfermedad que todos anhelan erradique para siempre, no solo por el daño físico que ocasiona al paciente también el psicológico, moral, humano, social y familiar, ya que ésta terrible etapa no distingue edad, color de piel, religión, estatus social, ni ningún tipo de calificativo.
Por ello, y por la importancia que merece el tema, la OMS creó el Día Mundial contra el cáncer en el año 2000, desde ese entonces cada 4 de febrero es dedicado a esta lucha que enfrentan millones de seres humanos alrededor de todo el mundo, siendo esta enfermedad uno de los principales problemas de salud pública.
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El cáncer es un proceso de crecimiento y diseminación incontrolados de células, que puede aparecer prácticamente en cualquier lugar del cuerpo, tal como explicó la Organización Mundial de la Salud, que añadió que el tumor suele invadir el tejido circundante y puede provocar metástasis en puntos distantes del organismo.
No obstante, este mal acarrea grandes consecuencias a las que sus afectados se enfrentan, así como sus familiares. Ante este hecho, se recomienda no anticiparse a los hechos, aceptar las emociones negativas y compartirlo con el entorno más cercano, como explicó la profesora de Psicología y Ciencias de la Educación de la Universitat Oberta de Catalunya, Tania Estapé.
Cómo enfrentar un diagnóstico de cáncer
Estos son algunos de los consejos para saber como responder ante un diagnóstico de cáncer:
1. No anticiparse a los hechos. Ansiedad, nervios, sudores, temblores, palpitaciones y problemas digestivos son las principales reacciones que las personas pueden experimentar durante la espera de los resultados de una prueba. «Ante esta situación es importante intentar relajarse y tratar de no anticiparse a futuros escenarios», aconsejó.
2. Aceptar las emociones negativas. Las emociones más frecuentes después del diagnóstico son el miedo, la ansiedad y la rabia, acompañadas de reacciones como la incredulidad.
3. Compartirlo con el entorno más cercano. Puede haber pacientes que al principio no se vean capaces de hablar de ello, porque se encuentran en su propio proceso de adaptación, pero que quizás más adelante querrán compartirlo con el entorno más cercano.
4. Cómo explicarlo a los niños. Una de las principales preocupaciones hoy en día es cómo afrontar la enfermedad cuando hay niños o niñas en casa. Estapé destacó que «el paciente no debe sentirse obligado o no a informar de la enfermedad a sus hijos, ni debe tener prisa para hacerlo», y que «es bueno dejar fluir las cosas y esperar a que llegue el momento adecuado».
5. No obligarse a ser positivo y estar animado. Seguir las instrucciones médicas y someterse a los tratamientos indicados implica una actitud positiva y proactiva, pero esto no quiere decir que con esta actitud la enfermedad se cure, ni que el afectado deba esforzarse y exhibirse en todo momento, aunque no se sienta así.
6. El papel de los familiares. El cáncer es un asunto familiar. Estapé apunta que los datos demuestran que «los familiares de enfermos tienen las mismas repercusiones psicológicas que el paciente», por lo que es normal recurrir a la ayuda de un profesional. «Lo más importante es que la familia apoye al enfermo y que no huya de él en situaciones en las que expresa miedo, tristeza o rabia». ha matizado Estapé.
7. Combatir el insomnio. Una vez en la cama, es habitual que el paciente empiece a tener pensamientos negativos y angustia y no pueda parar de dar vueltas, es recomendable salir de la habitación e ir a otro lugar de la casa.
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8. Vida laboral. Una de las principales cuestiones una vez diagnosticado el cáncer es si hay que seguir con la vida laboral o debe dejarse de lado. «Todo depende de lo que signifique la vida laboral para la persona: hay quien disfruta del trabajo porque se encuentra en un espacio satisfactorio, y también hay quien lo vive como una actividad negativa o difícil», valoró la especialista.
En general, se recomienda que el paciente lleve una vida más o menos normal, porque es como mejor se sentirá. Sin embargo, también hay casos en los que las personas ven el cáncer como una oportunidad de reflexionar sobre su vida y deciden cambiar su rumbo profesional o ponerse a estudiar.
Angélica Rodríguez
Con información de dpa y Diario de León.es
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