¿Cuáles son los errores más frecuentes al momento de escoger una pareja?

Pareciera ser que el estado ideal del ser humano es en pareja. El axioma se repite una y otra vez, casi tanto como las estadísticas que sentencian que alrededor de la mitad de los matrimonios en el mundo fracasan. ¿A qué se debe esta paradoja?

Estar en pareja, en estado pleno de amor, es sin duda una manera de encontrar la dicha. Pero las relaciones humanas son complicadas. El cineasta y actor Woody Allen, en el papel que interpreta dentro de su célebre film Annie Hall, expresa que no hay nada más absurdo e ilógico que las relaciones sentimentales.

Las personas viven en estado continuo de crecimiento y cambio. Parafraseando la archiconocida frase del filósofo Heráclito, nada nunca permanece igual. De este modo, la única garantía en la vida es, curiosamente, la muerte. ¿Cómo entonces asegurarse de tener éxito en una relación sentimental? Esto es imposible; sin embargo, existen muchas decisiones que llevan a las personas a catástrofes emocionales casi inevitables.

Independientemente del estatus, cada cual debe vislumbrar que, más que un romántico evento azaroso, el encuentro de la pareja “perfecta” es algo que depende de las decisiones y grado de madurez de cada quien; es una decisión que, como tal, se ve influenciada por numerosos factores, deseos, miedos e inseguridades. Evidentemente, por las razones anteriores, escoger una pareja no es un decisión sencilla y, en la mayoría de los casos, no se toma de forma muy consciente u objetiva, lo que podría explicar por qué un sinnúmero de personas se embarcan en matrimonios insatisfactorios.

No hay fórmula para el amor, pero ciertos expertos coinciden en que definitivamente hay errores que alejan a las personas del encuentro de una potencial “pareja ideal”, como sucumbir a estas actitudes:

  • No saber qué es lo que se está buscando, ni qué esperar de una relación amorosa.
  • Dejarse llevar por a la presión social: estándares prediseñados de lo que debe ser la belleza, narraciones irreales sobre cómo funciona el amor, imposición de temores a la soledad y pululación de un sinfín de prejuicios.
  • Problemas de autoestima y necesidad de atención, lo que lleva a querer estar con la primera persona que aparezca.

Muy probablemente, la principal causa responsable de terminar en una relación infeliz e insatisfactoria es la presión de tener pareja para encajar en los eslabones sociales. Sin embargo, conviene recordar que cada ser humano es diferente. Aunque haya muchísimos parecidos, cada persona funciona y actúa de forma propia; por ende, los dogmas, lugares comunes y estereotipos, tienen muy poca cabida dentro de las relaciones: cada historia es distinta a cualquiera que se haya contado antes. Lo que le funciona a una persona, no le tiene por qué funcionar a otra. La verdad, quien no sabe estar soltero, difícilmente pueda estar en pareja de manera exitosa.

Partiendo de lo anterior, quizá la mejor manera de escoger una pareja es, primero que nada, conociéndose a uno mismo. Si se vive en función a estándares sociales o a verdades impuestas, es muy difícil realizar el proceso de maduración personal que permita definir qué se quiere exactamente y cómo se quiere, para en base a eso poder tomar mejores decisiones.

LS

Con información de Pijamasurf.

Fotografía Gettyimages.