El proyecto comenzará en 2016 en Ruanda, a partir de la construcción de tres puertos que se completarán en 2020

Estos dispositivos voladores son conocidos principalmente por su uso para grabar escenas de obras audiovisuales con cámaras GoPro. Sin embargo, en países donde las infraestructuras suelen ser deficitarias y hay núcleos de población que viven en relativo aislamiento de los grandes centros urbanos, los drones podrían servir para proporcionar un servicio tan básico como es la provisión de medicinas.

Por eso, Ruanda ha sido escogido para albergar el primer aeropuerto para enviar medicamentos con drones. Se tratará de una prueba a gran escala, pero con la voluntad de que las operaciones sean plenamente funcionales.

Los dispositivos que salgan desde este complejo podrán cubrir casi la mitad del país. Una de las propuestas para la edificación de las instalaciones proviene del arquitecto Norman Foster y prevé la puesta en funcionamiento de drones de tres metros de envergadura, que podrán llevar cargas de hasta 10 kilos.

Y aunque todavía se desconoce el número de drones que conformarán la flota habitual de este aeropuerto, se sabe que se dividirán en dos tipos: unos encargados de la «ruta roja», pensada para emergencias sanitarias y de menor tamaño; y otros que cubrirán la «zona azul», centrada en transporte comercial.

Además, el Droneport contará con una clínica médica, una empresa dedicada a la construcción y reparación de drones, y una oficina de correos.

En el futuro se espera incluso que la capacidad de carga llegue hasta los 100 kg. Y en caso de demostrarse la viabilidad de este tipo de aeropuertos, la firma Foster+Partners contempla la posibilidad de construir otros 40 a lo largo del país y llevar este mismo proyecto a otros lugares como la República Democrática del Congo.

EC

Con información de AE Tecno.

Fotografía destacada Gettyimages.

Ruanda fue escogido para tener el primer "Droneport" por contar con una legislación más flexible para este tipo de tecnología y por sus avances en la materia.
Ruanda fue escogido para tener el primer «Droneport» por contar con una legislación más flexible para este tipo de tecnología y por sus avances en la materia.