En el desierto del Sahara habitan unas curiosas hormigas que brillan bajo el sol. Salen a buscar comida durante las horas en que las temperatura alcanzan los 70°C, con el objetivo de evitar ser atacadas por sus depredadores.

Aunque estos insectos mueren si su temperatura corporal supera los 53,6°C, sobreviven gracias al pelo triangular, un mecanismo de refrigeración descubierto por un equipo internacional de científicos.

De acuerdo a los resultados publicados en la revista Science, la hormiga plateada del Sahara puede salir bajo el intenso sol del desierto debido al revestimiento plateado de sus pelos, que sirve para reflejar los rayos solares, y a que sus pelos no crecen rectos hacia arriba, sino que al llegar a cierto largo giran en un ángulo de 90º para quedar en posición paralela a la piel, por lo que el espacio que se genera entre el pelo y la piel facilita el proceso de refrigeración.

«Nos dimos cuenta que estos dos efectos se ayudan entre sí», señaló Nanfang Yu, profesor asociado de física aplicada de la Universidad de Columbia, Estados Unidos, y autor principal del estudio.

Los científicos creen que este conocimiento puede aplicarse para diseñar superficies refrigerantes para vehículos, edificios, instrumentos y ropa.

AG

Con información de BBC.

Para los científicos éste es un ejemplo claro de cómo la evolución impulsó la adaptación de atributos físicos para garantizar la supervivencia.
Para los científicos éste es un ejemplo claro de cómo la evolución impulsó la adaptación de atributos físicos para garantizar la supervivencia.