La creación de Pepper el autómata capaz de interpretar las emociones, su creador toma inspiración para su siguiente proyecto

El Sumario – Kamame Hayashi, padre del popular robot Pepper, trabaja en un nuevo autómata que sea capaz de cumplir las funciones de despertar la empatía de un ser humano y remediar la soledad, y que pretende colocar en cada hogar.

Pepper fue comercializado en 2015 como el primer autómata capaz de interpretar las emociones y el lenguaje humanos, y se ha convertido en uno de los rostros más reconocibles de la vanguardia tecnológica de Japón, donde se le puede ver interactuando con personas en muchos establecimientos comerciales.

Pocos meses después de dejar Softbank, Hayashi fundó su propia compañía, Groove X, con objeto de desarrollar un autómata doméstico diferente, basado en las premisas de la comunicación no verbal, apariencia no humana y capacidad de conectar emocionalmente con personas.

«No me interesan las máquinas que sustituyen o emulan labores humanas, sino aquellas que nos pueden ayudar a sentirnos mejor», explica Hayashi, quien ha reclutado para su empresa a veinte personas de disciplinas tan diversas como la biología, la danza, la ingeniería industrial o los videojuegos.

Aunque la inteligencia artificial está cada vez más presente en aparatos cotidianos como los teléfonos móviles o los automóviles, «no hay muchas empresas tecnológicas trabajando para cubrir necesidades humanas básicas, como la de afecto o la de aceptación social», añade.

María Cordero

Con información de Agencias