El Sumario – Este 19 de julio, en Caracas, dejó de acompañarnos físicamente Monseñor Alfonzo Vaz; en reconocimiento a su legado y memoria retomamos y compartimos la interesante entrevista que nos concediera hace algunos meses:
En el marco de los preparativos de la nueva edición, corregida y mejorada, de su libro Bolívar Católico, Monseñor Alfonso de Jesús Alfonzo Vaz, asegura que es necesario hablar sobre esta faceta, poco conocida, de El Libertador y que también se enseñe en las escuelas.
Siempre me apasionó estudiar la vida de Bolívar, entre otras cosas porque resulta que «soy pariente lejano por su parte materna, de El Libertador, y de él siempre se ha conocido su amor por la libertad, pero de igual forma era un hombre de fe, su matrimonio por la Iglesia y su visita a Guanare, por la Virgen de Coromoto, un mes antes de la Batalla de Carabobo, lo demuestran. Mi interés por este aspecto de su vida comenzó con una pequeña tesis que llamé “Bolívar creyente”, luego, en 1999 nació el libro”, cuenta.
El gran amor de Bolívar fue su esposa María Teresa Rodríguez del Toro, quien murió desafortunadamente muy joven, entonces Bolívar prometió que no se volvería a casar y lo cumplió, explica, ¡se casó con la libertad!
Monseñor, quien afirma sentirse bien a sus casi 100 años, recuerda cuando fue Capellán de Infantería de Marina en 1957 como uno de “los momentos más duros de su vida”, sin embargo tal experiencia lo convirtió aún más, en promotor de la paz.
Respecto a la situación que vive hoy en día Venezuela, expresa su apoyo al diálogo como solución. “Hay que reconciliarse, ambos lados deben ceder. Por eso pido tanto a la Virgen que nos proteja e interceda por el país”.
“Hay que rezar, pedirle a la Virgen de Coromoto, nuestra patrona, al doctor José Gregorio Hernández y a la Madre María de San José, la Venezuela de hoy lo necesita”, manifiesta.
Entre otros hechos destacados de la vida de Monseñor está su amistad con el periodista Óscar Yanes y con Enrique Tejera París, diplomático y hombre de Estado. Así mismo, asegura que uno de sus sus mejores recuerdos es haber conocido y atendido en Caracas, a Jorge Mario Bergoglio, mucho antes de ser investido como Su Santidad el Papa Francisco, cuyo mensaje respalda y dice que es “perfecto”.
Las obras sociales también han sido parte de su misión, una de las más destacadas es La Ciudad de los Muchachos, donde niños y adolescentes reciben formación educativa y religiosa “que tanto necesita la juventud”.
A su edad, Monseñor poseía una lucidez y memoria que le permitieron hablar perfectamente de la actualidad mundial, de grandes personajes del pasado y que demostraron su preocupación por el futuro.
Texto: Alejandra Watts | David Carrasquel
Producción: @harryfebres
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